El Bioparque Temaikén, de 34 hectáreas de superficie total,cuenta con más de 2.000 animales divididos en 4 sectores y zonas, Asia, África, autóctonos y acuarios y lo que se busca con esto es exhibir a cada una de las especies en su hábitat natural.
Podemos encontrar mapas del lugar que nos van indicando cada sector del predio.
Su nombre "Temaikèn”, nace de la unión de dos vocablos tehuelches, Tem(tierra) y Aiken (vida), invoca el respeto de estos indígenas por la naturaleza.
El mayor atractivo con el que cuenta el parque es el acuario, en donde se pueden apreciar nadando a tiburones, rayas y otros peces de diferentes tamaños en una gran pecera vidriada que nos permite observarlos ampliamente. También en una más pequeña nos encontramos con los peces payasos, medusas, hipocampos, peces amazónicos, pirañas y arrecifes de coral, que son los mayores atractivos de los más pequeños.
Se nos complicó sacar fotos de la gran pecera dado que en el lugar había escasa luz y no podíamos utilizar el flash de la cámara, dado que, como lo explicaba un guía, la luz del flash deja temporalmente ciego a los peces, dado que carecen de párpados y por lo tanto para su protección, no se nos permitía sacar fotos de buena calidad.
Una Mantaraya mimetizada...
Murciélagos
En el sector en donde habitan actualmente 60 murciélagos pudimos conocer más sobre la dieta de estos misteriosos mamíferos. Los pudimos ver durmiendo, cuando se despertaban y cuando se alimentaban. Lo que nos llamó la atención fue cuando los cuidadores explicaban que sus alas llegaban a medir 1,70 mts de largo y lo pudimos comprobar cuando volaban en su hábitat. El lugar está acondicionado a la temperatura y la humedad que requieren estos mamíferos. A no perderselo si andan de visita por Temaikén.
Aquí los podemos ver durmiendo en su hábitat natural.
Hipopótamo
Pudimos observar como los más chiquitos eran atraídos al sector en donde estaba el hipopótamo. Hubo una sesión de entrenamiento donde los cuidadores mostraban su relación con los hipopótamos. Ellos relataban que como les crecen demasiado los dientes deben cortarlos una vez al año, pues llegan a medir medio metro de largo. Y para ello debe haber una relación de confianza entre el cuidador y el animal ya que se los cortan con una sierrita quirúrgica y tardan con cada diente 4 horas. Si, cuatro horas con cada diente por lo cual se requiere una gran paciencia y una gran confianza con el animal para que mantenga su boca abierta para que el cuidador pueda realizar dicha tarea. Lo pudimos ver a través de un gran vidrio que formaba parte de la gran pileta en donde se hallaba. Una atracción que se llevó la mirada de los más chiquitos y los más grandes.
Cine 360°
Nos encontramos a través del recorrido con "El arca de la vida”, un gran cine 360°, una proyección en 360 grados sobre una pantalla de 56 metros envolvente, y con efectos especiales, que nos transportan, a través de una película, a un mundo real en donde podemos observar como las paredes se "prenden fuego" o como nos "mojamos" por la gran tormenta.
El lugar es amplio, para observar la película de pie y cuenta con parantes o vayas para apoyarnos para ver la proyección de todos los ángulos. Una experiencia audiovisual que no deberíamos perdernos si vamos de paseo por Temaikén.
La Fundación Temaikèn tiene como objetivo proteger a la naturaleza, educando, investigando y conservando especies y ecosistemas y vos también podés ser parte de este gran proyecto.
Patos
Peces de colores
Tortugas de agua
Suricatas
Cebras
Aves
Temaikén cuenta con todos los servicios para que la familia pueda pasar un día espectacular, hay restaurantes, parrillas, minutas, mesas, sillas,bancos y sanitarios.
El predio tiene su propio estacionamiento gratuito, con capacidad para 5000 vehículos.
El parque se encuentra abierto de Miércoles a Domingo de 10 a 18 hs.El valor de las entradas es de $95 adultos ( 20 dólares) Jubilados y menores $74 ( 16 dólares)
Cotorra Blanca
Patos
Centros Interactivos, para promover la preservación del Medio Ambiente.
Carteles explicativos en cada sector.
Un antiguo Ford F-600 del año 1952, que era utilizado para el transporte de carga en la región patagónica a mediados del siglo xx.
Ford F-600
Caminos, pasillos y puentes realizados con troncos, sogas y cuerdas.
Aves y animalitos pequeños al alcance de nuestras manos.
Una pequeña ardilla mimetizada entre los arbustos.
Pudimos ver una exhibición de vuelo a cielo abierto de aves autóctonas cazadoras y carroñeras. ¡Un espectáculo impresionante!
En el sector del anfiteatro, sentados cómodamente, fuimos invitados a ver aves rapaces en vuelo.
Un entrenamiento con técnicas de cetrería que permite la rehabilitación de aves rescatadas. Vimos como el entrenador por medio de un silbato lograba que el ave descendiera y se apoyara en el guante de su cuidador. Pudimos ver un águila mora, un jote cabeza negra, un chimango y una lechuza de campanario.
Y para finalizar los más chiquitos pudierón sacarse fotos con los personajes de la pelicula "Buscando a Nemo"
Una salida recomendada tanto para niños, como para jovenes y adultos.
Autor: Arjona Delia.
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